Moisés es una de las personas con más trayectoria dentro de Netkia. Con más de una década de experiencia a sus espaldas y tras haber visto nacer y crecer la empresa, cuenta con un perfil multidisciplinar como desarrollador de software, lo que le permite estar cómodo en distintos tipos de proyectos y entornos y le proporciona el bagaje perfecto para aportar una visión global indispensable para equipos y clientes.
¿En qué consiste tu trabajo?
Junto con mis compañeros, me encargo de desarrollar, mantener y mejorar el software de nuestros clientes. La mayor parte de la jornada la dedico a programar, aunque siempre estoy en contacto directo con el cliente para ver de primera mano cuáles son sus necesidades y resolver sus dudas o problemas. Esta cercanía es la que nos permite conocerle mejor e identificar futuras necesidades.
A lo largo de tu trayectoria has tocado diversos sectores, clientes y lenguajes, ¿cuál han sido los proyectos más destacados? ¿Y los mayores retos?
Lo interesante de ser programador es que siempre te vas a enfrentar a un reto diferente, desde aprender una nueva tecnología hasta adaptar una solución ya existente por la aparición de un requerimiento inesperado.
De todas formas, al final, el reto más importante es no perder de vista el objetivo final, que no es otro que resolver los problemas de nuestros clientes. A veces puede ser complicado abstraerse de las complejidades que afrontas día a día para tratar de darles la vuelta a los problemas y convertirlos en el verdadero valor que se necesita crear. Y es en esto es lo que nos tenemos que centrar para darle un valor diferencial a nuestros productos y servicios.
Aportas gran versatilidad a la empresa, haciendo un poco de todo y tocando diversas áreas. ¿En cuál te sientes más cómodo?
Básicamente te diría que programando, como es evidente, pero también me siento muy cómodo tratando directamente con el cliente, viendo de primera mano sus necesidades antes de convertirlas en código.
Aportar soluciones a problemas, juntarme con mis compañeros y ponernos a investigar hasta dar con la solución adecuada también es de esos momentos en los que uno se siente a gusto.
A lo largo de toda tu trayectoria, ¿cuáles son las tecnologías que más has visto evolucionar?
Pues creo que no hay un indicador mejor para ver cómo ha evolucionado la tecnología que los teléfonos móviles. Hace 20 años, tener un móvil no era algo indispensable. Servían para llamar y mandar SMS. Hoy en día ya no son teléfonos sin más, se han convertido en unos gadgets multiusos con características tan avanzadas como las de un ordenador personal.
Bajo tu experiencia y visión, ¿hacia dónde crees que se dirige el sector?
Las aplicaciones informáticas cada vez se están orientando y vinculando más a la inteligencia artificial. Creo que la programación se irá poco a poco reorientando hacia las diferentes vertientes de la IA y los profesionales de esto vamos a tener que ir reciclándonos y adaptándonos.